Uso correcto de nebulización y humidificadores industriales para aire puro
La contaminación biológica es de consideración, sobre todo cuando esta misma se combina con otro tipo de polución, como la química. El moho es un claro ejemplo de contaminación biológica, el cual puede provenir de una instalación hidráulica en malas condiciones, y del mismo mal uso en humidificación, la cual, de paso, es sumamente necesaria a través del concepto purificante para erradicar otras poluciones biológicas, como virus, sobre todo a cuando se trata de nebulización.
Para mejorar la calidad de aire en interiores, es fundamental enfocarse en cuatro puntos clave, en el uso de climatización mecánica o natural. La dilución. Sumamente necesaria para diluir cualquier clase de contaminante que atente contra la condición ambiental de un determinado lugar, mientras la ventilación está en marcha. Extracción. De los caudales ya recirculados constantemente en todas las áreas, viciadas por distintos factores de suciedad; en ese sentido, las campanas de cocina, extractores y demás elementos, serán los encargados de deshacerse de ese aire ya contaminado. Contención. Es mantener el balance térmico en interiores, con la buena gestión y monitoreo de las condiciones de saturación atmosférica, con rangos de humedad adecuados, a través de humidificadores y desecantes. Limpieza. Los sistemas de aire acondicionado y calefacción, también deben auxiliar a una limpieza del mismo ambiente, con filtración óptima, y uso de nebulización o pulverización de partículas esencialmente dañinas a las vías respiratorias de las personas, cuya gama de contaminantes incluyen polvos, presencia microbiana, bacterias, virus, e incluso, los mismos gases y vapores.
El monitoreo de estos factores es esencial en todos sentidos, para asegurar las condiciones más reconfortantes para los ocupantes de una vivienda, entes comerciales y las mismas naves industriales. Obviamente dentro de las medidas de prevención, necesariamente se deberá recurrir a los procesos de mantenimiento en todos los espacios de acondicionamiento, ya sea en entradas naturales, y en la misma climatización mecánica, como humidificadores industriales, desecantes, aire acondicionado y la calefacción.
Fuentes de contaminación
Las fuentes de contaminación son de todo tipo, tanto en objetos inamovibles como en animales y personas en constante movimiento. Es necesario tener especial cuidado en objetos y áreas con predisposición a la aglomeración de humedad, como felpudos y cuartos de baño, en cuyo caso, la adición de sistemas de desecación será una prioridad, así como en la aminoración en la operatividad de los humidificadores.
Es importante discernir las consecuencias de las actividades microbianas en nuestros entornos, así como en las actividades químicas inherentes en las labores del ser humano. Después de todo, esta peligrosa combinación, resulta en una de las mayores causas de morbilidad y mortalidad en el mundo entero, incluso más relevantes que la polución atmosférica.
Si bien, los mejores tratamientos sirven para evitar las exposiciones a hongos, ácaros y otros focos de contaminación biológica, también es entendible que en el papel, es prácticamente imposible estar completamente marginados de esos microorganismos. Ahora, también es cierto que la humidificación a través de humidificadores industriales y nebulizadores, sobre todo para la limpieza de espacios y la propiciación de ambientes sanamente respirables, es una necesidad, pero en el proceso de un mal uso o en el descuido humano, es probable que se formen acumulaciones de saturación atmosférica. La clave está en el monitoreo o control de la humedad, para que el clima de toda área, ya sea grande o pequeña, esté en las condiciones ideales para el buen desempeño de las labores.
Por otro lado, la suciedad es otro factor preponderante, no solo en las superficies, sino en el aire que se respira, derivado del parcial o incluso nulo mantenimiento de los mecanismos para climatizar. Es fundamental tener una limpieza en toda una instalación de aire acondicionado y sistemas similares.
